Just for a while
Quiero pararme en el medio del mundo y que nada pase, quiero
gritar tan fuerte como el aire en mis pulmones lo permita, cuando no haya nadie
para escuchar, no quiero estar acá. Quiero perderme en lo terrible de mis
excesos, destruirme, pero lejos. Quiero esconderme en la muchedumbre para que
nadie más vea que sigo en pie y así tal vez olvidarme de lo desgastante que es
estarlo, a veces, quiero dejar de ser la triste yo. Quiero que dejes de verme
en tus fotos, que no recuerdes mi cara o mi voz, que no tengas mi aroma
prendido a tu piel, que no despiertes con miedo de que no esté, porque no
quiero que lo sufras, pero no voy a estar. Prefiero saber que el hecho de no
estar te da calma. Quiero que seas envidiablemente feliz, que tomes siempre el
camino correcto y que mires atrás sin dolor, pero no quiero que pienses en mí
nunca. No necesitas nada de lo que puedo darte, nada de lo que soy o pienso, ni
buenas ideas tengo. No soy capaz de cuidarte y es así como te hago daño. Me
gustaría poder decir que te fuiste una tarde, que tomaste tus cosas sin dejar
que note la falta de vos por todas partes en mi habitación, que me dejaste tu
oso de peluche, tus besos al despertar de la siesta y alguna otra cosa más.
Pero que te fuiste, a buscar tu felicidad. Porque te espera un futuro
increíble, lleno de errores y aciertos pero llevados de la mejor manera. No
quiero que las canciones de nuestras bandas favoritas te hagan pensar en mí,
quiero que le veas lo bueno a mi ausencia y disfrutes de todas las cosas y las
personas maravillosas que la vida te va a dar, que respires profundo cada
amanecer, y que sonrías cuando el sol te da en la cara, porque te hace ver
hermoso. Quiero que te recuestes en el pasto y que no pienses, que las ramas de
los árboles no te cuenten de mi vida. Quiero que seas así de lindo para siempre, porque lo sos, quiero que
seas feliz, y que eso no dependa de mí, porque ya no puedo hacerlo como antes.
También quiero que no sueñes conmigo, que por un tiempo no sepas siquiera mi
nombre. No quiero que reconozcas mi espalda en la calle, ni que recuerdes el
sabor de mis besos o lo bien que se sentían mis abrazos. Quiero que no sepas
quién soy, pero te pido por favor, que no me olvides.
Estoy cansado de sufrir por amor, corta.
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