martes, 8 de octubre de 2013

Motivos para presumir:
Solo me sé los colores del arco iris en italiano, soy parte de seis redes sociales o más, como helado en invierno, los paraguas me parecen una mierda, sé lo que es un zapato de claqué, hago las torta fritas más ricas que tu vieja, necesito menos agua que un camello, te molesta que no me importe si te caigo mal, en la escuela no aprendí a odiar, la ropa amarilla me queda bien, no pierdo los encendedores y cuando sonrío me achino, entre otras cosas.



Yo también voy un poco para atrás, pero no demasiado.
Solo voy a recuperar la sonrisa, esa bien china, para estar fuerte.
Por ambos.

miércoles, 2 de octubre de 2013

Ya sé que es tarde para pedir perdón por palabras imprudentes, pero la angustia no se va. Es la primer mañana de este momento horrible y tengo en el estómago un nudo, no puedo comer, no puedo pensar en nada más que en vos. Me sigo armando escenas de cada momento increíble que pasamos los dos, de cada situación de mierda que enfrentamos tirando juntos para el mismo lado, y hoy estás tan lejos, no en distancia porque es la misma, que puede desaparecer cualquier día, sino del corazón. No puedo creerme realmente que me soltaste tan fácil por algo tan tonto, que se escapó el amor en una tarde por un mal día. No puedo creer las palabras que dijiste, reducir todo a estar arrepentido de todo lo que hiciste. No puedo creerlo literalmente, necesito despertarme de ésto que sí tiene que ser un sueño, uno de terror. No estoy herida, estoy triste y por primera vez desde que entraste en mi vida me siento sola, como antes. Vacía, sin motivos. De pronto el camino recorrido se pone difuso y no sé cómo seguir. Te necesito, te extraño, te amo, por favor entendelo. Y una vez más perdón, perdón por todo lo que haya dicho alguna vez que te haya hecho mal, perdón por a veces no seguir tu tren, soy experta en descarrilar. Son las 7:11 am y ya lloro por primera vez, porque es la única forma que tengo de sacar afuera ésto. Ya no estás, porque no querés estar. No puedo entenderlo y siento en la frente presión porque la cabeza me da inconstantes vueltas, si todo lo que pasamos fue real, esto no puede ser cierto. Desvarío, y pienso mil y un formas de remendar mis errores, no sé si hay manera, espero que sí. No quiero graduarme de tu escuela, la historia termina en vos. Por favor volvé.

martes, 1 de octubre de 2013

Y después de hablar por horas como todas las noches desde hace meses, me fui a dormir. No como cualquier otra vez, con un buenas noches que se sintió tan particular que me hizo dormir con una sonrisa. La escena siguiente es del despertar, cuando me siento en la computadora y veo solicitudes tuyas de todos esos lugares donde ya no te tengo. La última fue Facebook, aceptar. Recorro para abajo como si no pudiera ver el contenido sin tenerte en mi lista de amigos. Me detengo en un video "Que nos alcance la vida..", un suspiro atraviesa mi sonrisa y una lágrima se me desprende hasta caer sobre el teclado. El primer estado es de hace horas, de un rato después a cuando me acosté. "Promises are promises". Sonó el timbre. Corrí a abrir y ahí estabas, con esa sonrisa de siempre, con esos ojos brillantes tan llenos cuando me mirás. "Promises are promises" repetiste apoyando en el escalón de casa dos o tres bolsos. Me alzaste y me diste el beso más hermoso que jamás viví, uno que traspasó los sueños, que tocó mi alma incluso dormida.
Me desperté con el corazón tan agitado que sentí que iba a salirse de mi pecho, 5:47 a.m.
Siento todavía la presión en el pecho, y ganas incontenibles de llorar porque no estás hoy acá, pero una paz enorme, porque a pesar de todo el amor que sentimos es lo que quiero para toda mi vida, y ya va a llegar.

Espero que se apure.

Forget it.

Protected by Copyscape DMCA Takedown Notice Infringement Search Tool